La noche del miércoles 12 de febrero, la tranquilidad de Amatlán de los Reyes, un municipio enclavado en la región montañosa central de Veracruz, se vio interrumpida por un ataque armado que dejó como saldo la muerte de una mujer y a otra persona herida.
El incidente ocurrió en la unidad Peñuela, a la altura de un puesto de comida, cuando los vecinos reportaron detonaciones de arma de fuego al 911. Al llegar al lugar, los cuerpos de seguridad y emergencia encontraron a Miguelina, una mujer de aproximadamente 45 años que atendía un puesto de comida en la Unidad Habitacional Erasmo Castellano Quinto. Pese a los esfuerzos por auxiliarla, ya no contaba con signos vitales, ya que las heridas de bala le provocaron la muerte de manera instantánea.
El tiroteo también dejó a otra persona lesionada, quien fue trasladada por sus propios medios a un hospital cercano para recibir atención médica. Mientras tanto, las autoridades acordonaron el lugar y personal de la Fiscalía General del Estado de Veracruz, peritos en criminalística y Policía Ministerial Acreditable realizaron el peritaje correspondiente.
El cuerpo de Miguelina fue trasladado al Servicio Médico Forense para realizar la necropsia de ley y quedar en espera de que sus familiares lo reclamen para su identificación oficial. Hasta el momento, no se reportan detenidos ni se ha dado a conocer información sobre los posibles responsables, dejando a la comunidad con incertidumbre y exigencias de justicia.
La violencia que azota a muchas regiones de Veracruz sigue cobrando víctimas, afectando no solo a quienes son directamente atacados, sino también a familias, negocios y comunidades enteras que viven con el temor constante de ser los siguientes en las estadísticas de inseguridad. Este lamentable hecho reaviva el debate sobre la seguridad en el estado y la eficacia de las autoridades para frenar la violencia que, día con día, parece acercarse más a la vida cotidiana de los veracruzanos.
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