
Aunque inició con tres horas de retraso, el primer día del alto el fuego en la Franja de Gaza terminó con un importante logro: la liberación de tres mujeres israelíes retenidas como rehenes y de 90 prisioneros palestinos, en su mayoría mujeres y niños. Este intercambio marca un momento de alivio en medio de un conflicto que ha sido devastador para ambas partes.
Las tres rehenes israelíes fueron recibidas en un punto de recepción al sur de Israel, en la frontera con Gaza, donde sus madres esperaban con ansias el reencuentro. Según el Ejército israelí, las mujeres llegaron sonrientes y en aparente buen estado de salud. Tras una evaluación médica preliminar en el lugar, fueron trasladadas en helicóptero para continuar con su recuperación.
El acuerdo de alto el fuego tiene un alcance significativo. En esta primera fase, que se extenderá por 42 días, está previsto que sean liberados 33 secuestrados -priorizando a niños, mujeres y ancianos- a cambio de más de 1,900 prisioneros palestinos. Muchos de ellos han estado detenidos desde los eventos ocurridos el 7 de octubre.
Este primer paso genera un respiro en un contexto donde la tensión ha sido constante, y deja entrever la posibilidad de avances hacia un entendimiento más amplio. Sin embargo, el camino hacia la paz aún es largo y lleno de retos, pero momentos como este permiten imaginar que un cambio es posible.
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