
Dos presuntos líderes del cártel de Sinaloa, Ismael “El Mayo” Zambada y Joaquín Guzmán López, fueron arrestados en El Paso, Texas, y están bajo custodia estadounidense.
Ismael Zambada, de 76 años, es cofundador y líder del cártel, mientras que Joaquín Guzmán López, de 38 años, es hijo de "El Chapo" Guzmán, quien cumple cadena perpetua en EE.UU. Merrick Garland, secretario de Justicia de EE.UU., declaró que estos arrestos son cruciales en la lucha contra una de las organizaciones narcotraficantes más peligrosas del mundo.
Ambos enfrentan cargos por liderar operaciones criminales, incluyendo la fabricación y tráfico de fentanilo. Chris Wray, director del FBI, señaló que los detenidos supervisaron el tráfico de grandes cantidades de drogas hacia EE.UU.
La DEA resaltó que estos arrestos afectan significativamente al cártel responsable de muchas de las drogas que matan a estadounidenses. Alejandro Mayorkas, secretario de Seguridad Nacional, elogió a los agentes por su valiente labor en desmantelar las operaciones de los cárteles.
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