La aterradora historia de Sarais González: Su hermana la encuentra sin vida tras días desaparecida

Un viaje que debía ser un reencuentro terminó en tragedia. Sarais González, una joven venezolana de 22 años, desapareció sin dejar rastro tras viajar a Temuco, Chile, para visitar a su novio. Su familia la buscó desesperadamente durante una semana hasta que la encontraron sin vida en el departamento del muchacho, quien ya estaba en prisión preventiva por otro delito.

El viernes 28 de febrero, el caso dio un giro espeluznante cuando la hermana de Sarais, decidida a encontrar respuestas, escaló por la fachada del edificio donde vivía Jason Barrio, el novio de 25 años. Al entrar, se topó con la escena que nadie quería imaginar: el cuerpo sin vida de su hermana. Todo quedó grabado en video y se convirtió en una prueba clave en la investigación.

De acuerdo con las autoridades, Sarais probablemente llevaba varios días muerta cuando la encontraron. Su desaparición comenzó el lunes 24 de febrero, cuando dejó su hogar en Maipú, en la Región Metropolitana, para encontrarse con Jason en Temuco. Casi de inmediato, su familia perdió contacto con ella y, ante la falta de respuestas, levantaron un reporte de desaparición y empezaron a buscar por su cuenta.

Mientras tanto, Jason Barrio había sido detenido por otro hecho violento: ese mismo lunes, irrumpió en la casa de un hombre con quien tenía problemas y lo atacó brutalmente, al punto de sacarle un ojo. Desde entonces, estaba tras las rejas, sin saber que su departamento se convertiría en la escena de otro crimen.

Aunque Jason aún no ha sido imputado formalmente por el feminicidio de Sarais, la policía lo considera el principal sospechoso. El cuerpo de la joven presentaba heridas punzocortantes, lo que sugiere un ataque violento antes de su muerte. Además, la descomposición del cadáver indica que fue asesinada antes de que su novio fuera arrestado. Para esclarecer los detalles, se realizará una autopsia el lunes 3 de marzo.

El caso ha conmocionado a Chile y Venezuela, pues Sarais se suma a la alarmante lista de mujeres asesinadas a manos de sus parejas. Mientras la investigación sigue su curso, el historial violento de Jason y su situación migratoria irregular podrían jugar un papel crucial en el proceso judicial.

Por ahora, la familia de Sarais clama por justicia, esperando que su muerte no quede impune y que su historia no se repita en otra mujer que solo quería amar sin miedo.