Arlette Cerón Vargas, miembro del Colectivo Marea Verde Altas Montañas, señala que los grupos de WhatsApp entre amigas y familiares actúan como redes de apoyo para adolescentes y jóvenes que se sienten amenazadas en la calle.
Ella opina que el uso positivo de la tecnología ofrece una capa adicional de protección. Herramientas como compartir la ubicación en tiempo real, enviar fotos directamente desde un grupo de WhatsApp, o utilizar funciones de dictado y comandos de voz para llamar a números de emergencia o familiares, contribuyen a la seguridad de los jóvenes en Orizaba, la región y el estado de Veracruz en general. Cerón Vargas destaca que no debería ser necesario depender de estos grupos para sentirnos seguros, ya que todos, hombres y mujeres, tienen el derecho de salir y estar protegidos. Señala que los hombres no suelen tener que pedir a alguien que les envíe un mensaje cuando lleguen a casa, y que las mujeres no deberían tener que hacerlo tampoco.
Ella subraya que utilizar la tecnología adecuadamente puede marcar una diferencia significativa, permitiendo a los grupos de amigas compartir ubicaciones en tiempo real y llamar a números de emergencia solo con hablar al teléfono.
Marea Verde mantiene un chat general para sus miembros, donde si alguna se siente insegura, puede informar a las demás para que quien esté cerca pueda ofrecer apoyo o un lugar seguro.
Diariamente, se reciben aproximadamente seis mensajes relacionados con acoso o intentos de secuestro. Cerón Vargas recuerda un caso reciente que se volvió viral en redes sociales, en el que un sujeto disfrazado de payaso intentó secuestrar a jóvenes cerca del mercado Cerritos.
Claudia Ortiz, otra miembro del colectivo, lamenta que no todas las mujeres cuenten con estas redes de apoyo. Recuerda que durante el taller anti-princesas celebrado a principios de mes, participaron chicas de comunidades remotas, quienes aplican los conocimientos adquiridos en sus comunidades para ayudar a niñas, jóvenes y mujeres locales.
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