Este miércoles, 14 de agosto, se llevó a cabo la apertura de la cuarta Feria Nacional del Libro Infantil y Juvenil en el antiguo convento Betlehemita. La inauguración, marcada por una asistencia moderada y un calor intensificado por la alta humedad, dio inicio al evento que promete una variada oferta cultural. Aunque el primer día suele ser de baja afluencia, se anticipa una mayor concurrencia para el jueves, especialmente por ser quincena, según Adriana Jiménez de la librería El Vitral.
Las puertas del recinto, ubicado en Francisco Canal, se abrieron al mediodía, momento en el que el calor alcanzaba su punto máximo. Por ello, muchas familias optaron por asistir en horas más frescas. Iris García Cuevas, coordinadora de la feria, destacó que los visitantes podrán participar en talleres, funciones artísticas, espectáculos de títeres, poesía, música y baile, además de explorar una oferta de aproximadamente mil 500 libros exhibidos por más de 27 expositores.
Bajo el lema “Leer para salvar el mundo”, el evento presenta más de 150 editoriales con una amplia gama de títulos. La feria ofrece actividades para todas las edades, desde talleres sobre el cuidado del medio ambiente y juegos literarios, hasta técnicas de dibujo y creación poética. Además, contará con un programa literario que presentará las últimas novedades en literatura infantil y juvenil, y un encuentro de escritores de ciencia ficción con autores destacados del género.
En la inauguración también se rindió homenaje a María Luisa Moya Franco, promotora cultural con 25 años de dedicación a la cultura infantil y juvenil.
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