El poder de la naturaleza: Huracanes Helene y John golpean México.

En los últimos días, México ha sido escenario de la fuerza de la naturaleza con la llegada de los huracanes Helene y John. Ambos fenómenos climáticos tocaron tierra en distintas zonas del país, dejando a su paso inundaciones, fuertes vientos y cuantiosos daños materiales.

El huracán Helene impactó la región sur del país, afectando principalmente los estados de Oaxaca y Guerrero. Los residentes se enfrentaron a lluvias intensas que provocaron desbordamientos de ríos, deslaves en zonas montañosas y cortes de energía eléctrica. Muchas familias tuvieron que ser evacuadas para resguardarse en albergues, mientras las autoridades trabajaban a contrarreloj para despejar carreteras y restaurar servicios básicos.

Por otro lado, John, con su paso por el noroeste de México, puso en alerta a Baja California Sur y Sonora. Este huracán provocó fuertes marejadas que dañaron la infraestructura costera, además de derribar árboles y postes eléctricos. A pesar de los esfuerzos por mitigar los efectos, decenas de viviendas resultaron afectadas y muchos comercios se vieron obligados a cerrar por las condiciones extremas.

Afortunadamente, gracias a la preparación previa y a las medidas preventivas implementadas por las autoridades, las pérdidas humanas fueron mínimas. Sin embargo, los estragos materiales siguen siendo una preocupación, y las labores de reconstrucción podrían extenderse durante varias semanas.

La temporada de huracanes aún no ha terminado, por lo que se recomienda a la población mantenerse informada y seguir las indicaciones de protección civil. Aunque los fenómenos naturales no se pueden evitar, la preparación puede hacer la diferencia en momentos críticos como estos.

¿Y tú, estás listo para lo que queda de la temporada?