El caos se apoderó de Culiacán este jueves 6 de febrero de 2025. En una jornada marcada por la violencia, la capital de Sinaloa registró tiroteos, incendios y la muerte de al menos una persona, dejando a la ciudad en un estado de alerta. Los hechos, dispersos en distintas colonias, obligaron a las autoridades estatales y federales a desplegar un fuerte operativo de seguridad en la zona oriente, desde Alturas del Sur hasta la salida a Carrizalejo.
El primer estallido de violencia ocurrió en la colonia 5 de Febrero, donde un tiroteo cerca del bulevar Agricultores dejó una persona herida y una vivienda vandalizada en el fraccionamiento Camino Real. Pero esto solo fue el inicio. Horas más tarde, en la colonia Revolución, un negocio de sushi y comida china fue consumido por las llamas. En el lugar se encontró un vehículo calcinado con un cuerpo en su interior, y testigos aseguran que la camioneta habría chocado contra el establecimiento antes de incendiarse. Según informes preliminares, en su interior se hallaron cartuchos de arma de fuego, lo que alimenta la teoría de que la unidad era perseguida antes del impacto.
La violencia no se detuvo allí. En la colonia Amistad, un hombre fue encontrado sin vida con heridas de bala. Aunque aún no se ha determinado si este hecho está relacionado con los anteriores, las especulaciones no tardaron en surgir. De manera extraoficial, se ha mencionado que la casa incendiada en Camino Real pertenecería a Samuel León Alvarado, hermano de Dorian Trinidad León, un exintegrante de alto rango del Cártel de Sinaloa de la vieja escuela. Dorian, según reportes, operaba en el tráfico de fentanilo hacia Estados Unidos al servicio de Los Chapitos, lo que levanta dudas sobre si esta serie de ataques podría estar vinculada con ajustes de cuentas dentro del crimen organizado.
Ante la ola de violencia, la Secretaría de Seguridad Pública de Sinaloa activó un operativo especial con el Grupo Interinstitucional, que incluye fuerzas estatales y federales. Patrullajes constantes, puntos de control y revisiones vehiculares forman parte de las acciones implementadas para recuperar el control de la ciudad. Las autoridades han pedido a los ciudadanos cooperar con las revisiones de rutina, recomendando a los automovilistas disminuir la velocidad, encender las luces interiores y bajar las ventanillas al cruzar los retenes.
Hasta el momento, el saldo es de un muerto, un herido y varios daños materiales. Sin embargo, la incertidumbre reina en Culiacán. Las autoridades no han dado información sobre posibles detenidos ni han confirmado las identidades de las víctimas, dejando muchas preguntas en el aire. Mientras tanto, la ciudad sigue en vilo, esperando respuestas y, sobre todo, seguridad en medio de un panorama cada vez más incierto.
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