La madrugada de este martes, un golpe certero a la estructura criminal del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) sacudió la región de Zacapu, Michoacán. En un operativo interinstitucional, fuerzas de seguridad lograron la captura de Jesús Rivera Aguirre, alias "Don Chuy", señalado como el principal operador del grupo delictivo en la zona. Sin embargo, la detención no pasó desapercibida y desató una ola de violencia que paralizó a varias comunidades durante horas.
El arresto tuvo lugar en un domicilio de la calle Ciriaco Torres, en Zacapu, cerca de la carretera libre a Zamora. Junto a "Don Chuy" fueron detenidas tres personas más, quienes estaban en posesión de armas de fuego y drogas. La intervención no fue sencilla: se registró un enfrentamiento que dejó como saldo a dos elementos de seguridad heridos. Tras el operativo, miembros del grupo criminal reaccionaron con bloqueos y quema de vehículos en distintos puntos estratégicos, como las carreteras Erongarícuaro-Pátzcuaro, Naranja de Tapia y Pátzcuaro-Quiroga.
El clima de tensión obligó a la suspensión de clases en la cabecera municipal de Zacapu, como medida preventiva para resguardar la seguridad de estudiantes y docentes. Autoridades estatales confirmaron que el operativo fue resultado de una acción conjunta entre la Fiscalía General de la República, el Ejército Mexicano, la Guardia Nacional y la Secretaría de Seguridad Pública de Michoacán.
El gobernador del estado, Alfredo Ramírez Bedolla, destacó la relevancia de la detención y subrayó que la operación fue planeada desde la Ciudad de México por instancias federales, con apoyo de las autoridades locales. "Se logró el objetivo, lo que representa un paso importante en la estrategia de seguridad en la región", declaró en conferencia de prensa. Además, advirtió que no es el único líder criminal en la mira y que ya existen órdenes de aprehensión contra otros cabecillas del crimen organizado.
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