
En Córdoba, los socavones se han convertido en un problema de seguridad y movilidad cada vez más alarmante, afectando tanto a automovilistas como a peatones. En calles céntricas y colonias residenciales, los hundimientos en el pavimento y banquetas deterioradas son ya parte del paisaje urbano. Aunque muchos habitantes se han resignado a circular con precaución extrema, otros señalan que estos problemas, lejos de ser resueltos, empeoran con las lluvias constantes y el tránsito pesado en la región.
Uno de los puntos más críticos se encuentra en la zona del centro de la ciudad, donde los socavones no solo ralentizan el tráfico, sino que representan un riesgo para peatones y personas con movilidad limitada, que se ven obligados a sortear los huecos y banquetas fracturadas. "Salir de casa y caminar en una banqueta sin riesgos es casi imposible", comenta una residente de la Colonia Centro. El problema se agrava por el tipo de terreno y las lluvias recientes, que provocan que el agua se filtre bajo las calles y desgaste las bases, generando que el asfalto y concreto ceda.
Ante estos desperfectos, los cordobeses han mostrado su preocupación a través de redes sociales y llamados a las autoridades locales, solicitando una intervención rápida y efectiva.
Algunos vecinos organizan manifestaciones y exigen que el presupuesto de obras públicas priorice la reparación de estos puntos críticos en lugar de nuevos proyectos, dada la urgencia del problema. Hasta el momento, aunque el ayuntamiento ha atendido ciertos puntos, la magnitud del daño parece superar la capacidad de respuesta. Las autoridades locales han mencionado que se evalúan planes de reestructuración de drenaje y pavimentación, pero muchos ciudadanos señalan que la reparación de un socavón puede tardar meses, e incluso años.
Comentarios